La reforma tiene como objetivo mejorar las condiciones de habitabilidad, salubridad, accesibilidad y seguridad estructural de la vivienda entre medianeras preexistente. Las condiciones de habitabilidad actuales son precarias: las habitaciones, la sala de estar y el baño no tienen una ventilación e iluminación natural adecuadas.
En general la salubridad de la vivienda se precaria ya que la renovación de aire es deficiente, factor agravado por una falta de impermeabilización de las soleras en contacto con el terreno que favorecen una presencia de humedad ambiental excesiva que produce condensaciones superficiales en paramentos y la aparición de hongos. La actuación genera un patio central al que dan las estancias, dispone de una solera aislada e impermeabilizada y crea un sistema de ventilación de doble flujo para el aire de salubridad.
Las condiciones constructivas de la edificación son malas y propician un progresivo deterioro constructivo y estructural de la edificación. La vivienda está formado por un conjunto heterogéneo de sistemas constructivos y malas resoluciones de los detalles constructivos, fruto de una adición sucesiva de volúmenes propia de las edificaciones suburbanas autoconstruidas. La actuación simplifica la volumetría y resuelve de una manera adecuada la construcción y estructura de la edificación.
La accesibilidad de la vivienda es complicada ya que hay escalones de diferentes tamaños y desniveles dispersos por los accesos a las diferentes piezas. La actuación concentra los escalones en puntos estratégicos y deja las unidades de uso en un solo nivel, permitiendo un uso de la vivienda cómodo y de mejor accesibilidad.